Algunas naves merecen ser colocadas en cristal y marco. Ahora, una de las operaciones de construcción noruegas más sensacionales del año ha tenido lugar alrededor del antiguo barco Hurtigrute MS "Finnmarken".
Hay un arte en poner un barco en una botella, pero también hay un arte en realizar trabajos de construcción alrededor de un gran barco. El museo que alberga el antiguo barco polar Fram de 1936 es un punto de referencia y destino turístico dentro del fiordo de Oslo. En Estocolmo está el museo Vasa, construido alrededor de un barco de guerra de 1628.
Ahora Stokmarknes en Vesterålen también ha ganado un llamativo edificio de firma arquitectónica construido alrededor de un viejo barco. MS “Finnmarken” se hizo a la mar en 1956, el mismo año en que Elvis Presley debutó en las listas musicales estadounidenses con “Heartbreak Hotel”. El queso Jarlsberg también se lanzó ese año y el primer automóvil Troll salió de la fábrica en Lunde Telemark. El barco Hurtigrute navegó a lo largo de la costa noruega en todo tipo de clima hasta diciembre de 1993. El otoño siguiente fue donado al museo Hurtigrute en Stokmarknes.
LINK Architecture diseñó el museo. Ya está lista una instalación gigante alrededor de un barco de 81,2 metros de largo, quizás el edificio más llamativo jamás construido en un país nórdico desde que se completó la Catedral del Ártico en Tromsdalen en 1965.
El principal empresario detrás de la instalación es PEAB Bjørn Bygg AS, y la sucursal de Bodø de Protan Entrepreneur AS asumió el desafiante trabajo de cubrir el techo y las paredes con sus exigentes ángulos.
El mayor desafío estaba en las paredes del hastial y la fachada de las partes del edificio que se encuentran contra la proa y la popa del barco, explica el líder del proyecto, Kent Ove Nilsen, de Protan Entrepreneur AS en Bodø.
Hubo un énfasis especialmente fuerte en la estética y el acabado del aislamiento y el techado en estas partes del edificio. Los ángulos, giros y vueltas en las paredes a dos aguas fueron especialmente desafiantes para los techadores de Protan Entrepreneur.
Los giros y vueltas de la fachada hacían imposible cubrirla verticalmente, por lo que tuvimos que hacerlo horizontalmente y así trabajábamos contra la gravedad en todas las direcciones. Además, era casi imposible establecer un andamio debido al diseño de la fachada, por lo que tuvimos que hacer el trabajo desde un ascensor, explica Nilsen.
Cómo las soluciones de Protan pueden potenciar la arquitectura, así como el exterior y la identidad de un edificio.
La sucursal de Bodø de Protan Entrepreneur AS tiene mucha experiencia y conocimientos que fueron evidentes en un proyecto como este. Resolvieron desafíos técnicamente exigentes a lo largo de todas las temporadas, y con una pandemia además de todo esto. El proyecto comenzó en enero de 2020 y la construcción se completó en noviembre.
Por naturaleza, literalmente, esta construcción tiene que tolerar muy mal tiempo y viento. Exactamente como el barco Hurtigrute tuvo que tolerar la espuma del mar y el viento del norte, el museo Hurtigrute y su nuevo edificio protector deben tolerar el duro clima polar durante mucho tiempo. Los huracanes no son inusuales en Stokmarknes y esto crea demandas adicionales en las fijaciones de los techos. Para este proyecto se usaron alrededor de 32000 sujetadores; en comparación, un edificio normal de tamaño similar con un techo plano necesitaría alrededor de 20000 sujetadores.
El clima es un desafío para proyectos como este. Cuando trabajamos en edificios en este tipo de ubicación, cerca de la costa en Vesterålen, el pronóstico a largo plazo se limita a lo que ves en el fiordo cuando te das la vuelta. Las condiciones cambian muy rápidamente, dice Nilsen.
Protan AS y el jefe de ventas Bjørn Nordseth participaron en la fase de planificación del proyecto con los arquitectos de LINK y el consultor de Multiconsult. La membrana utilizada para el techo y la fachada es el CoolRoof lacado completamente blanco, una versión del Protan SE 1.6.
Al estar lacado, también es más resistente a los impactos externos y conservará mejor su color blanco. Incluyendo las paredes laterales, se utilizaron un total de aproximadamente 4500 metros cuadrados de productos para techos ecológicos.
Colocar un techo en un edificio tan llamativo y especial es quizás uno de los trabajos más difíciles que puede asumir un techador. ¿Cómo vivieron este trabajo?
Cuando estamos en medio de esto, con desafíos relacionados con el clima, el progreso y las soluciones técnicas, es bastante exigente. Pero cuando lo hacemos bien, obviamente es genial. Es algo de lo que estamos orgullosos de ser parte, dice el líder del proyecto de Protan Entrepreneur, Kent Ove Nilsen.
